Hay ocasiones en que una persona termina por realizar sus actividades de manera habitual, ya sea levantarse todos los días para ir al trabajo o para llevar a los niños a la escuela y de ahí partir al trabajo o regresar a hacer todas las responsabilidades de un hogar.
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Lo mismo pasa cuando se tiene una rutina para relajarse o divertirse. Un día puedes ir con tu pareja o la familia al cine y el siguiente salir con los amigos a comer o ir a un bar. Por lo tanto es difícil dejar de lado no visitar a tu lector de tarot.
Dentro de la rutina es difícil querer probar cosas nuevas y más cuando se trata del tarot, ya que esta práctica necesita de tu presencia para que puedas ofrecer a las cartas y al lector de las mismas la energía para saber qué orientación requieres hacia ciertos temas.
Decides probar algo nuevo y por lo tanto buscas en internet o en la calle un lugar que te ofrezca la lectura de tarot por teléfono. Al hacerlo, comenzaras a platicar tan solo un poco de ti hacia la tarotista que se encuentra del otro lado del teléfono.
Sabes que necesita un poco de información para saber un poco de ti, por lo tanto las preguntas sobre la fecha de nacimiento, el signo del zodiaco, la hora y el lugar. Hablarán mucho sobre los rasgos personales, tanto de carácter como físicos.
Así que desde ahí, ya tienes una segunda duda. Es muy fácil que se pueda sacar información a una persona que sabe algo de psicología, lo sabrás al momento de que comience a formular preguntas a las cuales no estas acostumbrada o acostumbrado cuando lo haces en persona. Lo mejor es intentarlo para que tengas una opinión al respecto.
Artículo creado y diseñado por Alicia Conde y el tarot telefónico