Los triunfos mayores y el tarot telefónico
En vista de lo que se sabe de los naipes del tarot telefónico parece probable que fueran ideados para representar grados o peldaños en un sistema de iniciación. En ciertos sentidos las figuras del tarot se parecen a los símbolos de la alquimia, la cual, como ha mostrado C. G. Jung, era para sus seguidores avanzados un sistema de instrucción hermética conducente a una iluminación espiritual.La alquimia occidental surgió probablemente en Egipto, en la cultura helenística de Alejandría, que fue además un primer baluarte del gnosticismo. De ser así, los tratados de alquimia y los naipes del tarot telefónico representarían sendos ejemplos del lenguaje secreto del simbolismo que los iniciados de todas las épocas han ideado para instruir a sus discípulos y confundir a los profanos.
Estas arcanas doctrinas han sido objeto de nuevos escrutinios en los tiempos modernos al haber descubierto Jung que las obras de los alquimistas escondían un sofisticado sistema para la consecución de la integración física que resultaba notablemente similar a los grados del "proceso de individuación" ideado por el propio Jung.
El comienzo del tarot telefónico
Jung definía la individuación como la creciente consciencia de sí mismos del individuo y de la sociedad; un proceso ordenado de desarrollo físico que conduce a una dimensión más completa, a un "redondeamiento" creciente de la vida.
El creía que el impulso hacia la madurez puede adoptar dos formas. Primero, hay el proceso natural de crecimiento que tiene lugar en cada ser viviente, y que se produce también en el hombre sin dirección ni control conscientes por su parte. En segundo lugar, puede existir un programa de desarrollo interior dirigido y conscientemente estimulado por doctrinas y prácticas concretas.